Una propuesta innovadora que transforma la experiencia educativa en el Bioparque y promueve el derecho a la educación ambiental para todas las personas.

Fundación Temaikèn incorporó réplicas táctiles de animales emblemáticos —como cebra, tapir, flamenco, carpincho, pelícano y avestruz— diseñadas en 3D especialmente para personas con discapacidad visual. Esta iniciativa forma parte del programa “Ambiente Inclusivo” y busca asegurar el derecho de todas las personas a vivir experiencias educativas significativas en contacto con la naturaleza.

El proyecto fue posible gracias a la donación de estas réplicas por parte de la Fundación Ninawa Daher, que impulsa iniciativas inclusivas a través de recursos como planos hápticos, audioguías y reproducciones 3D en espacios educativos, culturales y recreativos.

Estas réplicas permiten explorar con las manos la forma, textura y proporciones de cada especie, transformando la visita al Bioparque en una experiencia sensorial, pedagógica y emocional. Ubicadas en distintos puntos del parque, están acompañadas por información accesible y fueron desarrolladas bajo criterios de realismo, durabilidad y usabilidad táctil.
“La inclusión también es conservar. Si solo una parte de la sociedad accede al conocimiento sobre la biodiversidad, la educación ambiental se vuelve incompleta y excluyente”, explicó la Lic. Laura López Ojeda, Especialista en Inclusión de Fundación Temaikèn.

Esta acción se enmarca en una visión de conservación de Fundación Temaikèn que pone en el centro la equidad, el respeto por la diversidad humana y el acceso pleno a la educación. Las personas con discapacidad visual, que muchas veces enfrentan barreras en entornos pensados exclusivamente desde lo visual, encuentran en estas réplicas una oportunidad concreta para el conocimiento, el asombro y el vínculo con la naturaleza.

Además de su impacto individual, este tipo de estrategias:

• Fomentan la empatía: sensibilizan al público general y fortalecen valores como la equidad y la convivencia.
• Diversifican la experiencia pedagógica: enriquecen la educación ambiental a través de lo táctil, lo auditivo y lo sensorial.
• Tienen impacto en la infancia: vivir experiencias inclusivas desde edad temprana favorece la autoestima, el desarrollo y la integración de niñas y niños con discapacidad.               

 “Algo que nos honra es el trabajo que llevamos a cabo acompañando la accesibilidad a la cultura y a la educación. Esto concreta un desafío de progreso en la apertura del arte a la discapacidad”, expresó Alicia Daher, madre de Ninawa y presidenta de la Fundación.

La Fundación Ninawa Daher fue creada por la familia de la periodista fallecida Ninawa Daher, en homenaje a su legado. Trabaja para promover la accesibilidad en espacios culturales, educativos y recreativos a través de recursos como planos hápticos, audioguías y reproducciones 3D, en defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Esta incorporación no es solo una mejora física. Es una transformación cultural: una invitación a repensar cómo nos vinculamos con el ambiente desde una mirada verdaderamente inclusiva.